La pastelería artística es una disciplina muy compleja, pero poco se habla de las dificultades que implica transportar las esculturas comestibles.
Un accidente durante el transporte dañó una torta tamaño real de Taylor Swift que perdió sus manos camino a una importante exhibición de pastelería en Birmingham, Inglaterra. La creación, que representa a la cantante con su icónico vestido azul y blanco de The Eras Tour, sufrió la mutilación mientras viajaba desde Windsor hasta el National Exhibition Centre.
La pastelera búlgara Elza Baldzhiyska, quien dedicó más de 100 horas a este proyecto, encontró su obra de arte comestible no solo sin las manos, sino también con grietas en los hombros y el cabello de la estrella. Sin embargo, la pastelera se dispuso a reparar el daño: «Elza está comprensiblemente decepcionada y sorprendida por el daño», comentó un testigo del incidente.
La torta de Swift es una de las 1.500 creaciones que se presentan en el evento, que incluye obras de panaderos, artistas, chocolateros y chefs pasteleros. Entre otras piezas destacadas se encuentra una réplica de la Reina Isabel I, creada por la artista del azúcar Emma Jayne, y un dragón gigante del escultor Gary Pollard. El evento también celebra su 30° aniversario con una torta de 2,13 metros de altura.